Emily Cabral
Bermuda
17 años
Emily Cabral nunca tuvo vergüenza de jugar con varones. Cuando tenía solo 6 años, Emily se unió a un equipo local de varones, porque en esa época, no había equipo de niñas. En la isla de Bermuda, tener las niñas el mismo acceso al fútbol que los varones era una trayecto lento y estático. Cuando Emily tenía 13 años, otras dos niñas decidieron unirse al equipo, y las cosas comenzaron a cambiar. Emily se convirtió en la capitana del equipo y demostró que, en el terreno de juego, el legado de una persona está determinado por las aptitudes y no por el género.
Hoy, a los 17 años, Emily es senior en una escuela secundaria y miembro del equipo campeón del torneo Sub-15 Concacaf B. La oportunidad de jugar para su país le sirve como un enorme sentido de orgullo para la naciente estrella del fútbol, y espera llegar a ser profesional un día. Su amor por el deporte se ha traducido en ayudar a otras niñas a sentirse incluidas y empoderadas, independientemente de lo que decidan querer lograr en sus vidas. Ella expresa su reconocimiento a su amiga Danni por haberla alentado durante todo el tiempo y representa un modelo a seguir para el grupo de (menos de 9 años) niñas que ella entrena. “Cuando eres parte de un equipo, estás uniéndote a una familia. Las dificultades y los obstáculos parecen desaparecer, porque tienes una red de gente enraizándose para ti. Recomiendo a todas las niñas a participar en los deportes a fin de experimentar ese soporte incondicional. Es realmente un entorno único que me ha configurado para el éxito, ahora y en el futuro.”
